Hace algunos años se hablaba de la carpeta de investigación como “un cúmulo de hojas que van surgiendo en el proceso, principalmente en la investigación, y que no requiere ningún tipo de formalidad”. Evidentemente en aquellos años el sistema acusatorio se empezaba a (permítaseme la expresión) cuajar en el país, nadie sabía a ciencia cierta cómo iba a ser la operatividad del nuevo sistema, nadie sabía que muchos detalles, en ese momento obvios, iban a generar uno que otro dolor de cabeza.